Hacía
tiempo que Alberto no daba señales de vida
Como buen
amigo no dejaba de preocuparme por él, la última vez que desapareció tuve que
rastrearlo con un perro sabueso por el desierto de Atacama, donde me confeso’
que un señor muy rico le había prometido tierras y palacios a cambio de un
trabajo , pero que el lo rechazo' y luego de la entrevista se quedo' caminando por
el área y se perdió.
Me decidí a pasar por su departamento en la calle Yerbal en Caballito, al llegar el portero
me dijo que lo veía un poco
cambiado pero bien, lo cual me
tranquilizo’.
Al subir me
encandilo’ fuertemente la luz entrando por el ventanal de la escalera y sentí’
en mi pecho falta de aire debido a un fuerte olor a incienso en
el ambiente.
Al pararme
delante de su puerta me abrió antes de que golpee’, lo cual me sorprendió de
manera, me dijo “Gracias por responder a mi llamado”, no quise discutir de que
yo lo había llamado , me contente’ con verlo bien.
Vamos … ya
es hora – me dijo con voz suave y empezó a bajar las escaleras.
-“Es
extraordinario!!! -Seguía murmurando,- en el camino te explico”
Me limite a
seguirlo, supuse me aguardaba una agradable sorpresa, sentí en mi cuerpo una
sensación de bienestar abrumadora y lágrimas de felicidad brotaban espontaneas
rodando despaciosamente por mis mejillas
(quizás impulsadas por el humo del incienso que entraba por el ventanal).
Nos
dirigimos por Yerbal hacia la estación de tren Caballito en un día como tantos otros en que nos
juntábamos a tomar algo en algún bar de Flores ( la próxima estación)para
charlar con amigos o jugar una partida de billar.
Alberto
caminaba un poco apurado como ansioso e impaciente por mostrarme algo.
En la
esquina de Yerbal y Rojas una viejecita nos paró’ y sin decir nada procedió a
abrazarlo , Alberto sin sorprenderse le beso’ la frente.
Una vez en
la estación me llamo’ aún más la atención su aspecto desarreglado, su barba, su pelo largo mientras
pensaba para mi “ este Alberto sigue viviendo en los 70”s
Al subir al
tren le perdí un poco el rastro debido a la gran cantidad de gente que viajaba,
asumiendo que habría un numero de 10 o 15 pasajeros entre nosotros chequeando a
lo lejos podía ver moverse su melena que parecía ahora haber crecido .
En solo
tres minutos bajábamos en la estación Flores, pero debido a la muchedumbre
tratando de bajar y subir del tren decidí quedarme quieto en el andén esperando se
despeje para poder visualizarlo.
Lo que
siguió me dejo’ consternado, la figura de Alberto caminando por el andén
quedaría en mi mente por el resto de mi vida de una forma notablemente
perturbante.
Vestía una
túnica blanca larga hasta los pies, mientras un manto rojo cruzaba su cuerpo
colgando desde el hombro izquierdo y calzaba unas sandalias de cuero.
Caminaba
como en trance hacia la Plaza Flores, mis pasos lo seguían desde lejos con
euforia y desconcierto, sin dejar de sentir fuertes espasmos ante la certeza de
que mi amigo estaba perdiendo la razón por no decir que estaba completamente de
la nuca.
El guarda
de la estación detuvo mi trance al tomarme fuertemente de mi brazo y
preguntarme en tono intimidatorio “Es usted uno del grupo?”
Quien sabe
porque extraña razón conteste’ sin saber de que se trataba -“Noo , no , yo no
lo conozco”. Entonces el guarda insistió
medio molesto –“pero si , si yo los veo cuando bajan del tren y se van a
tomar café a la confitería San Jose.
Entonces
volví a la realidad de golpe y me di cuenta que el señor nos había visto con
anterioridad de la transformación mística de mi amigo, por lo tanto le respondo
“ No… si ,…él es Alberto , mi amigo, no se muy bien que le ocurre… pero no del
grupo no soy “ .Continuando-“ Disculpe la pregunta de qué grupo?
-“Vea amigo
-el guardián utiliza ahora un tono grave solemne-ahora cuando baje del anden va
a ver otros dos pelilargos con pinta de mendigos, que lo siguen y luego en la
esquina una de las chicas de la casa de masajes de la cortada se une al grupo
,y al entrar a la plaza otros dos y una señora
de cabellos largos”.
-“Disculpe
, no entiendo siguen a mi amigo no se dan cuenta ?...
-“No se
‘-sigue el guarda, sin dejarme terminar -cuando llegan al centro de la Plaza,
donde esta el monumento a Pueyredon, podés reconocer entre ellos a la virgen
María ,Magdalena y los 12 apóstoles, esto ocurre cada miércoles a las 12 y
cuarto del mediodía.
Un sudor
frio me corría por la espalda, me alejo corriendo tratando de alcanzar a
Alberto que desaparecía al bajar las escalinatas de la estación
Al alejarme
escucho los gritos del guarda –“Pedile que rece por mí”.
Confirmo la
figura del grupo esperando su llegada en el centro de la plaza
Se une a
ellos sin decir nada, se dirigen hacia la esquina para cruzar hacia la Iglesia.
Al llegar a la esquina , a pesar de que el semáforo estaba en rojo dos del
grupo toman del hombro al cieguito Manuel que vende caramelos en ese punto y lo
arrojan violentamente al tráfico enloquecido de la avenida Rivadavia .
El pobre
hombre deambula aterrorizado, aturdido por los chirridos de los frenos , los
bocinazos y los insultos desde los vehículos, tratando de salvar su miserable
vida.
Alberto se
lanza a cruzar y lo toma de la mano apurando el paso hasta alcanzar agitados la
vereda de enfrente.
El grupo
restante cruza ahora con la luz verde para unirse al infeliz dúo al grito de “
milagro es un milagro”.
El grupo
exaltado marcha hacia la Basílica San Jose de Flores, entran apurados por el
lindante pasaje “Salala” , y luego de unos minutos contemplo desde enfrente
algunos de ellos dispersarse saliendo por el otro costado de la iglesia a
través del pasaje conocido como “Pescadores” pero ya vestidos con ropas
normales caminando como si nada hubiera pasado.
Nada supe
mas de Alberto pero por las dudas evito pasar por la Plaza los miércoles al
mediodía.
Mas relatos en :
PEPE
http://desgranandomomentos.blogspot.com.es/
Altamente recomendable otra historia sobre personajes de Flores , las mismas calles,las mismas tristezas en
El Chelo de Bacacay
https://lasbalasdelcampanario.blogspot.com.au/2012/08/el-chelo-de-bacacay-cuento-1993.html?m=0
Es buenísimo tu relato, muy ameno, me ha encantado leerlo.
ReplyDeleteCreo que tu amigo no tenía un punto de locura, sino un punto y seguido :)
Muchos besos.
punto de no retorno jaja . un abrazo
DeleteUna locura sistemática, con intención de tener adherentes. Y diría que una locura peligrosa.
ReplyDeleteBien contado.
No te pares en la esquina de Rivadavia y Fr Cayetano un Miercoles al mediodia,los lugareños lo saben bien. Jaja gracias Demi un abrazo
DeleteLa locura de los incomprendidos, de los raros, de los diferentes... Quizás seamos nosotros los locos sin capacidad de ver a los que en realidad son _o podrían ser_ nuestros salvadores. Excelente relato. Un abrazo 😊
ReplyDeleteLa locura multiple es por demas misteriosa , un tipo que se cree el mesias no es raro pero conseguir todo el elenco sin casting asi como asi es fanastico
Deletehttp://lasbalasdelcampanario.blogspot.com.ar/search?q=El+Chelo+de+Bacacay
ReplyDeleteEse es el problema de la Estación Flores y la zona de la Plaza.. No se sabe bien qué es ficción y qué realidad, aunque dicho esto, los que anduvimos algún tiempo por allí sabemos que tampoco eso importa demasiado.. Alberto, el Chelo, Correa, el mozo de Tio Fritz, los personajes de Dolina.. todos forman parte del mismo cuento, uno que por ahora desconoce los fantasmas del epílogo.. Abrazo
no hay consuelo ni males ni fiereza
Deletees un gris que se hospeda a fuego lento. ...dicho con tus propias palabras hace algun tiempo.Me alegra aun como extra haber transitado por sus calles y espiado sus espectros , comodamente desde las mesas de sus bares
Acabo de leer la historia del Chelo , fascinante obviamente ambos personajes se han cruzado entre el cortinado del teatro barrial. Fantastico!!!
DeleteBravo amigo me has dejado loca de la nuca jajaj . Es muy bueno narrado con una soltura que me ha tenido super enganchada a ver que pasaba al final ..mi enhorabuena .
ReplyDeleteUn abrazo y feliz tarde.
Muchas gracias , un abrazo
DeleteCaramba pero si todo estaba predestinado para que fuera tan real como la vida misma. No seremos los locos los que solo miramos en vez de ver? Digo.
ReplyDeleteImpresionante tu relato, en serio. Besos.
Un loco me dijo alguna vez que a Jesus lo crucifican todos los dias, lo que pasa que nosotros perdimos el interes en el espectaculo,Creo que es una gran verdad en cada pobre , marginado , perseguido , torturado etc etc se revive la agonia del calvario ante nuestra indiferencia. Un abrazo
DeleteMe has recordado a Horacio Quiroga, a Jorge Amado, a Carlos Fuentes... un punto de locura no sólo en el relato sino en el propio estilo de la narración, de ese recordado y tan vuestro, tan nuestro, realismo mágico.
ReplyDeleteEnhorabuena.
Los nombres del cartel me hacen sentir chiquitito , un maestro Quiroga, pero gracias de todas formas , me siento altamente alagado ,Abrazo
DeleteEse pelįn de locura parece tan real que logra que muchos se unan.
ReplyDeleteMe saltó el corazón de su sitio cuando lanzaron al tráfico a Manuel, un milagro que Albergó realizó para salvarlo.
Me gusta como relatas, eres muy bueno.
Aqui entre nosotros .no hay milagro, a los locos y a los borrachos de la zona los protegen los angeles grises(todos ya lo saben) y la "muñeca"de los conductores de Buenos Aires preparados para manejar en la locura, el transito y lo imprevisto
DeletePues eso de un puntito de locura...ya puestos que sean puntos suspensivos....Es buenisimo, besos.
ReplyDeleteMuchas gracias . Un abrazo
DeleteUna locura contagiosa y de seguir así... ;-)
ReplyDeleteUn abrazo, Javier
Contagiosa y hasta puede que peligrosa...
ReplyDeleteUn grupo delirante,gracias por pasar por mi blog abrazos
DeletePuro realismo mágico, como dice Pitt.
ReplyDeletemuchas gracias, un gran abrazo!!
DeleteExcelente historia, y situada en el barrio de Flores y conjugándose con la historia y la religión, podría ser parte de uno de los libros del amigo Dolina o bien del amigo Marechal.
ReplyDeleteabrazo!
Flores esta en muchos de mis relatos , que nadie piense que intento citar al maestro , vivi en caballito, pero camine mas por Flores, creci, jugue al futbol , tome, baile por esas calles, alli conoci a la mujer de mi vida ,con la cual estoy casado y tengo tres hijas Gracias Frodo
DeleteCurioso relato, con su punto de locura, que lo hace ser mágico y muy original. Además, las fotografías acompañaban los párrafos a la perfección, casi como ver una película.
ReplyDelete¡Besos jueveros!
No te olvides de la musica de Nick Cave , un artista que sienmpre abordo el tema de la locura en sus letras y su musica
DeleteEso es surrealismo puro. A veces suceden cosas inexplicables, o nos lo parece y también es cierto que hay personas que sufren grandes transformaciones en su persona por una serie de circunstancias. Seguro que eso le pasó a Alberto.
ReplyDeleteUn abrazo
Ese punto en que De Niro habla con la TV en Taxi driver, o el cantante Pink se afeita las cejas en The Wall, ese instante que hiela la sangre . Gracias Carmen
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